Javier Hermida Ruiz (Alcalá de Guadaíra, Sevilla, 1962) es un pintor, dibujante, diseñador, creador de contenidos gráficos, ilustrador y, sobre todo, profesor de Artes Plásticas y Visuales. Su formación académica como licenciado en Bellas Artes es parte, no decisiva por insuficiente, de su proceso de crecimiento como creador. Su talento y destreza artística deben más al aprendizaje continuo desde muy joven de fuentes diversas y de su enorme curiosidad intelectual y artística.

Su obra abarca técnicas y formatos muy diversos; el dibujo, el diseño, la creación audiovisual, la ilustración, la dirección artística de eventos y, sobre todo, la pintura. Dentro de su faceta como pintor destaca su maestría en la acuarela, tanto paisajística como en el retrato. Sus acuarelas reflejan el conflicto artístico y técnico entre la sencillez de la belleza y la complejidad técnica de la creación. Hermida recibe influencias pictóricas de algunos de los mejores pintores de la importante escuela paisajística alcalareña. Su versatilidad en cuanto a los formatos y temas y su constante proceso de aprendizaje y mejora lo han convertido en uno de los más destacados creadores artísticos de su tiempo y entorno.

La creación artística de Hermida es la culminación de un riguroso proceso de observación, interpretación y sublimación de las imágenes hasta convertirlas en belleza, en el milagro de la trascendencia artística y estética. En este proceso, cabe destacar su fidelidad al dibujo no como herramienta sino como la génesis imprescindible de su pintura y de sus diseños. En su proceso de creación ocupa un lugar preeminente su curiosidad y rigor intelectual, no limitado a las artes plásticas sino enriquecido por su apreciación y conocimiento musical, cinematográfico, histórico, literario y hasta científico. Es un creador extremadamente exigente y honesto, respetuoso con el espectador de obra artística pero no sometido al imperio del mercado o de la crítica artística.

En su faceta como diseñador e ilustrador, Hermida ha participado en proyectos de pabellones, muestras, museos de relevancia internacional, y esta dedicación profesional ha añadido exigencia técnica y adaptación de su creación artística a formatos y finalidades muy diversas; desde muestras arqueológicas (destaca su impresionante trabajo en el Museo Arqueológico Nacional de Estambul) a museos de muy diversa temática. Una vez más su trabajo no se circunscribe a la replicación de imágenes sino a la plasmación de ideas, conceptos abstractos. Sus dibujos están también presentes en libros de formato diverso; desde libros de texto a creaciones literarias. Hermida entiende la ilustración como complemento enriquecedor de los textos, con la finalidad de acompañar, no de sustituir, explicar ni desvirtuar lo expresado en palabras, pensando no sólo en la mirada exigente del espectador de imágenes sino, sobre todo, en la del lector.

Juan Antonio Muñoz Andrade